Duelo de volteretas fue el que se vivió la noche de viernes en la cancha del estadio Jalisco en el festejo de la Jornada 10 en la Liga de Ascenso, donde los Lobos de la BUAP se llevaron el empate a tres ante los Leones Negros de la U de G, que debieron venir de atrás para impedir que los Licántropos se llevaran la honra.
Cotejo en el que los visitantes abrieron el tanteador con el 0 a 1 apenas transcurridos los 5 minutos de acción, siendo Juan Manuel Sara el que habría de horadar la cabaña rival tras un descuido en la zaga, marcando así el rumbo que siguió el compromiso que fue intenso de principio a fin.
Ante la adversidad, Leones reaccionó para el 1-1 al 7 en el reloj mediante Álvaro Estrada, que aprovechó un rebote a disparo en el larguero para meter su remate en la cabaña angelopolitana, que se lamentó el haber cedido la ventaja, dejando todo como en un inicio, lo que reavivó las intenciones de obtener el triunfo en ambos cuadros.
Para mala fortuna de Jorge Aravena y sus pupilos, los felinos jaliscienses volvieron a tocar la puerta enemiga con éxito, encontrando en el ex Lobo, Rodrigo Follé, al encargado de darle la vuelta a la tortilla, convirtiendo en un tiro de esquina el tanto que a los locales les dio el 2 a 1, al 15 en el cronómetro.
Sin embargo, ello lejos de mermar el ánimo en el conjunto Lobezno, los orilló a pelear cada jugada con la intención de doblegar de nueva cuenta al rival, logrando su cometido al 23 a través de Miler David Castillo, que cuando buscaba el centro de Omar Monjaraz, la zaga y el arquero no despejaron, dejando el esférico a merced del ecuatoriano que igualó con el 2 por 2 parcial.
Cuatro minutos más tarde, al 27, una jugada casi idéntica, en trazo largo de Metlich, no fue bien atacado por la defensiva, abriendo el camino para el remate del propio Castillo, que no perdonó y celebró con todo el 2 a 3 que auguraba algo mucho más intenso para lo que restaba aun de partido.
Tan es así, que al 29, una falta en el área de José Octavio Guerrero fue avalada por el árbitro central con la pena máxima, que en primera instancia, fue concretada por el veterano, Miguel Zepeda, pero para su desgracia, sus compañeros invadieron la zona antes del disparo, obligando a un segundo cobro, mismo en el que la figura del arquero Licántropo, Óscar Jiménez, fue fundamental, ya que el guardavallas atajó el esférico para conservar la ventaja en honor a los de la BUAP al medio tiempo.
Ya en el complemento, Lobos estuvo cerca de incrementar su cuota con par de arribos sobre el marco felino, quedando en el recuerdo el remate que Juan Manuel Sara no alcanzó a conectar correctamente, para así darle vida a los de la U de G, que sobre la recta final, rescataron el tanto que obligó al reparto de unidades.
Llegado el 73, en un tiro de esquina, el ataque de Leones techó a la zaga para que Diego Armando Esqueda la prendiera de volea con furia, decretando así el 3 a 3 definitivo que no se movió, aun cuando ambos clubes buscaron afanosamente el evitar la división del botín que al final prevaleció.
